En vacaciones, los pequeños de la casa necesitan una dosis extra de entretenimiento. Hay muchas actividades que se pueden hacer en familia al aire libre, para así acercarles a la naturaleza al tiempo que les animamos a practicar ejercicio físico. Además de caminatas por el campo y deportes, podemos proponerles esos juegos de toda la vida que son perfectos para conectar las distintas generaciones. Fortaleceremos así los vínculos afectivos entre los miembros de la familia.
Los dispositivos electrónicos pueden convertir el tiempo de ocio de niños y jóvenes en demasiado estático. Por eso es positivo introducir otro tipo de actividades que activen su psicomotricidad; enriquecerán su juego y les harán conocer mejor la cultura popular. Los juegos tradicionales de cada país y región forman parte de un acervo cultural valioso y necesitado de protección.
Los hay más relacionados con el movimiento, con el que trabajarán el equilibrio, la coordinación, el ritmo y la lateralidad. Pero además, aprenderán a tomar decisiones en equipo, crecerán en valores como el compañerismo, mejorarán su vocabulario, socializarán, desarrollarán su imaginación y pensamiento creativo, aumentarán su capacidad de adaptación, etc.
Estos son algunos de los más conocidos juegos tradicionales:
La comba, las chapas, el diábolo, los disparates, las tabas, antón pirulero, el veo veo, la peonza, el burro, las canicas, el juego de las sillas, el rescate, el balón prisionero, el tres en raya… Seguro que padres y abuelos pueden compartir con los más pequeños aquellos juegos que les retrotraen a su infancia. Serán momentos muy especiales y divertidos, con lo que las tardes de verano seguro que se pasan volando.
Accesibilidad
visibility_offDesactivar luces
titleMarcar encabezados
settingsColor de fondo
zoom_outAlejar
zoom_inAcercar
remove_circle_outlineDisminuir fuente
add_circle_outlineAumentar fuente
spellcheckFuente legible
brightness_highContraste brillante
brightness_lowContraste oscuro
format_underlinedSubrayar enlaces
font_downloadMarcar enlaces