La importancia de potenciar los hábitos de vida saludables desde la infancia
En el Colegio CEU San Pablo Sanchinarro sabemos que es imprescindible que, desde Primaria, fomentemos entre nuestro alumnado hábitos saludables. La razón es que las costumbres que se establecen en los primeros años nos acompañan el resto de nuestra vida.
Un hábito es la repetición de acciones hasta que llegan a ser nuestra forma automática de hacer las cosas. Crear rutinas sanas relacionadas con la alimentación y la actividad física, además de fomentar la prevención, es garantía de una vida adulta con una salud de calidad. En este contexto se enmarca el programa CEU saludable.
El equilibrio en la alimentación es clave
En el Colegio CEU San Pablo Sanchinarro tenemos cocina propia en la que se elabora un menú diseñado por profesionales de la nutrición y la dietética. También se elaboran menús para alumnos con intolerancias o alergias y adaptaciones a las dietas o regímenes que puedan seguir. Además, según la edad, el alumnado tiene más o menos autonomía a la hora de servirse, siendo en todo momento supervisados por profesores.
Somos conscientes de la importancia de la comunicación con las familias en este sentido, para que haya equilibrio entre las comidas y las cenas. Por eso, el menú se envía cada mes a padres y madres.
Pero nuestro compromiso va más allá: formar a nuestros alumnos para que sean capaces de diseñar su propia dieta saludable, que sean capaces de elegir los alimentos más adecuados y que desarrollen una relación sana con la comida, son algunos de los objetivos de las actividades que realizamos en las aulas. Un ejemplo es la que llevaron a cabo en torno al Proyecto Bassari, para conocer cómo es una dieta sana y saludable. Además, hemos podido contar con los consejos profesionales de Lucía mi pediatra, sobre cómo es una alimentación infantil saludable.
El huerto escolar es otra forma de que el alumnado se relacione con el entorno y que además sea consciente de la importancia del consumo diario de vegetales.
La actividad física, el otro elemento fundamental
En el Colegio fomentamos una vida activa, clave para una vida saludable. Lo hacemos desde el desarrollo de la psicomotricidad en las primeras etapas a la práctica de distintos deportes a medida que nuestros niños crecen.
La obesidad infantil es una enfermedad que está alcanzando cifras preocupantes en nuestro país, y el sedentarismo es uno de sus principales desencadenantes. La mejor forma de prevenirla es potenciar las actividades mejor adaptadas para cada edad. En el Colegio no nos limitamos a los deportes más comunes, y les ayudamos a conocer otras disciplinas llenas de valores, como por ejemplo, la escalada.
Además, el deporte no solo sirve para mejorar la salud física de nuestros alumnos. Es una forma de que conozcan conceptos como la solidaridad, el compañerismo, el trabajo en equipo, la honestidad, la competencia sana, el ocio saludable, el juego limpio… Es por tanto, un aprendizaje integral.
En casa también se pueden complementar estos esfuerzos: pactar las horas delante de la tele o con la consola, realizar actividades de ocio activo en familia, proponer picoteos saludables de fruta, establecer un calendario de cenas saludables… Con todo esto conseguiremos niños sanos y sentaremos las bases de una vida adulta que también lo sea.
