XXI Congreso Católicos y Vida Pública: por el derecho de los padres a elegir la educación de sus hijos
Otro año más nuestro Colegio participará en el Congreso Católicos y Vida Pública, una propuesta de la Asociación Católica de Propagandistas (ACdP) y la Fundación Universitaria San Pablo CEU que se celebrará los próximos 15, 16 y 17 de noviembre en el Campus de Moncloa de la Universidad CEU San Pablo.
En esta ocasión el lema es «Libertad para educar, libertad para elegir», con la temática de la libre elección de la educación de los hijos como eje central. También se quieren descubrir otras realidades educativas y alertar cuando no se respeta esa libertad. Así, se propone un marco de encuentro y reflexión para cuantos católicos y personas de buena voluntad interesados en conseguir que la luz del Evangelio de Jesucristo ilumine todos los aspectos de la vida, tanto en sus dimensiones personal como social.
La libertad para educar, un derecho irrenunciable
Este es un derecho fundamental a ojos de la Iglesia Católica, que ha sido incluido como uno de los tres irrenunciables por Benedicto XVI en un discurso ante un numeroso grupo de eurodiputados el 30 de marzo de 2016. En palabras del Santo Padre, «por lo que atañe a la Iglesia católica, lo que pretende principalmente con sus intervenciones en el ámbito público es la defensa y promoción de la dignidad de la persona; por eso, presta conscientemente una atención particular a principios que no son negociables». A continuación, hizo referencia a la necesaria protección de la vida en todas sus etapas, así como a la familia como unión entre un hombre y una mujer, para añadir expresamente a estos derechos irrenunciables la «protección del derecho de los padres a educar a sus hijos».
Un defensa que se ha visto refrendada recientemente por los obispos andaluces, quienes, justo antes de las elecciones de su comunidad autónoma de 2 de diciembre pasado, señalaron la necesidad de que sea protegido «el derecho de los padres a educar a sus hijos según las propias convicciones morales y religiosas […] sin que se les imponga una visión ética concreta».
Por todo esto, el Congreso se centrará en la necesidad de que los padres puedan elegir el modelo de educación para sus hijos, garantizando así realmente la libertad de enseñanza.