Emprendimiento: aprendizaje orientado a la acción
Potenciar el carácter emprendedor del alumnado es uno de los grandes objetivos del modelo educativo del Colegio CEU San Pablo Sanchinarro. Con ello conseguimos que nuestros estudiantes aprendan a tener iniciativa, desarrollen la seguridad y confianza en sí mismos y sepan aceptar riesgos asumiendo responsabilidades.
Un buen ejemplo del compromiso de los colegios CEU con el emprendimiento es la iniciativa CEU emprende, pero en las aulas trabajamos día a día para potenciarlo.
Educación para el futuro
Fomentar el emprendimiento es fundamental si queremos que nuestros niños sean profesionales de éxito capaces de crear, poner en práctica sus ideas, innovar y adaptarse a lo que venga.
Además, otorgar un papel tan importante al emprendimiento trae múltiples beneficios. Esta competencia es clave para desarrollar la creatividad, el pensamiento positivo, la asertividad y la capacidad para resolver conflictos y tomar decisiones. Al fomentarla invertimos en la autonomía de los niños y jóvenes, así como en su capacidad de superación.
El emprendimiento mueve el corazón, la inteligencia y la valentía.
Formando en el emprendimiento desde los primeros años
En el Colegio CEU San Pablo Sanchinarro ofrecemos un entorno de aprendizaje innovador, estimulante y creativo. Precisamente, el pensamiento creativo será una baza fundamental en el desarrollo del carácter emprendedor, así como la capacidad para trabajar en equipo.
El profesorado trabaja para reforzar la autoestima del alumnado, enseñarle la importancia del esfuerzo y de aceptar de forma positiva los errores, como ocasión de aprendizaje que son. Creamos así un ambiente positivo, en el que las críticas constructivas se aceptan con optimismo, como ayuda para mejorar.
Los profesores también brindan su apoyo y ayuda a los estudiantes para que descubran qué les apasiona y en qué pueden destacar, para así reforzarles. Con esto se consigue potenciar su inteligencia emocional y se les enseña a mirar al futuro con entusiasmo y esperanza. Así ganarán en autonomía y creatividad, con una mente abierta.
También es relevante transmitirles que las decisiones tienen consecuencias, y hay que saber evaluarlas antes de elegir una opción, así como aceptarlas cuando llegan. Esto es fundamental para que niños y niñas sean autónomos y capaces de decidir por sí mismos, con libertad, con responsabilidad y sin miedo.
Por otro lado, fomentando el emprendimiento en las aulas se potencian valores y habilidades muy valiosas: el trabajo en equipo, la colaboración con el resto de compañeros, la comunicación interpersonal, la socialización, la importancia del respeto y la tolerancia, etc.
Una ventaja para su vida profesional
El beneficio de potenciar el emprendimiento en la educación es que formaremos a jóvenes activos, capaces de poner en práctica sus propios proyectos, todo dirigido a construir una sociedad futura innovadora y eficaz.
El papel del profesorado es inspirar a los alumnos y animarles a poner en marcha sus ideas. En un futuro incierto en el que la automatización tendrá protagonismo, ser capaces de crear su propio puesto de trabajo facilitará su desarrollo profesional.